He aquí el modelo Signature de Darryl Jones, el bajista actual de los Rolling Stones, y con un curriculum impresionante.
Este es uno de los bajos más especiales que han pasado por aquí. Explico por qué: el bajo en sí está construido meticulosamente para parecerse lo más posible a un Fender de los 70. Hasta ahí todo normal, porque hay varios bajos así en el mercado. Pero es que este está realmente bien hecho, con una atención a los detalles pasmosa. Las únicas diferencias con un Fender Vintage es que este Lakland pesa menos y no tiene puntos muertos.
Las pastillas Aero pasivas entregan un sonido clásico con toda la pegada que le falta a tantos bajos modernos.
Un poco de historia: durante años, el luthier (y bajista) del área de Boston Albey Bagochian construyó bajos basados en los Fender más clásicos, y Darryl Jones fue uno más de los muchos que le encargaron un instrumento que le permitiera llevar al directo todo el carácter y el sabor añejo de un Fender Vintage, pero en u instrumento que no fuera una pieza de museo ni delicado, sino un instrumento funcional. Cuando Albey dejó la construcción (para dedicarse más a tocar), Darryl Jones acudió a sus paisanos de Lakland en Chicago para que le hicieran una réplica de su bajo, dando lugar al Darrly Jones Signature.
Pero aún hay más. Al pedir este bajo, especifiqué que viniera con el previo J-Retro que diseña y fabrica John East en Inglaterra. Técnicamente, el previo es impresionante, con un nivel de ruido ridículo y una musicalidad fuera de lo común. Al activarlo, el sonido gana en pegada ligeramente, pero lo mejor es que no modifica el caracter de las pastillas. Sencillamente suena "mejor" (lo pongo entrecomillado porque es una apreciación subjetiva y personal). Las 3 bandas de EQ (con medios semiparamétricos) son todo lo que se puede pedir, y desde luego otras marcas deberían tomar ejemplo. Incluso al poner los mandos al máximo, nunca deja de sonar genial este bajo.
Los graves dan peso y pegada sin emborronar ninguna nota. La frecuencia sobre la que actúan es 50Hz, pero a medida que vas realzando más, la banda se va estrechando para evitar actuar sobre bandas "vecinas"
Los agudos están centrados en 3KHz si realzas, y 1KHz si recortas, de modo que al recortar se tiene la sensación de un sonido más profundo.
Al tirar del control de agudos, se activa un switch de brillo centrado en 7Khz, que da ese toque de brillo y ataque a través de un tweeter sin volverse agresivo ni chillón, sino cristalino.
Mención especial merece el control de balance de pastillas. Como ya sabéis, en muchos bajos este control funciona realmente como un interruptor de 3 posiciones, porque en cuanto mueves el potenciómetro de su posición central, entra una de las pastillas casi al 100%. Sin embargo, en el J- Retro este control es continuo y progresivo, de modo que permite unos puntos intermedios muy interesantes.
Los previos J Retro se pueden pedir como opción para cualquier Lakland tipo Jazz Bass (modelos Darryl Jones y Joe Osborn).